Inmediatamente fué propuesto por el Hno. Antonio Tacaronte y secundado por el Hno. Grillasca, que se solicitara la carta Patente a la Gran Logia Soberana de Puerto Rico, que para entonces tenía su cede en Mayagüez. Así fué aprobado Jubilosamente por todos los presentes.
El Hno. Santiago Pietri, ofreció a la Logia un local, en la calle del Agua, el mismo que ocupó desde 1892 hasta el 6 de junio de 1955, cuando fué destruido para construir el nuevo edificio.
Fué de acuerdo de todos comprar dicha casa mediante acciones y a plazos. El Hno. Ulpiano Colón prestó 144 pesos, y 32 centavos, para adquirir la necesaria decoración para el Taller. La logia empezó a funcionar y antes de terminar el año, había hecho su ingreso, por iniciación y afiliación un gran número de hermanos.
La Logia fué consagrada con toda solemnidad del ritual, el 7 de mayo de 1893, y al efecto se acordó dar cuenta al Gobierno General de la Provincia para cumplimentar lo estatuido en la Leyes de Asociaciones con certificación de haber quedado constituida de un todo, la ‘Logia Luz de la Montaña”.
En el 1894, por Real Orden se le concede a Adjuntas el título de Villa, el 15 de junio de 1894, siendo para entonces gobernador de Puerto Rico, General Don Antonio Daban y Ramírez de Arellano, quién gobernó desde el 10 de enero de 1893 a el 22 de junio de 1895. El alcalde de Adjuntas lo era Don José Garrigó.
En dicha época, ocurrió un alzamiento en los pueblos de Yauco y Adjuntas. En el 1895, también ocurre que una plaga de insectos conocida por “vaquitas” arrazó los cafetales de Adjuntas.
Como mencionamos, para el 1895, el alcalde lo era el Sr. Don José Carrigó, considerado el mejor alcalde y más activo de los ejecutivos de la época de España.
Construyó la segunda casa Alcaldía, ya que la primera fué consumida por un incendio, perdiéndose así toda documentación sobre el pueblo hasta aquel entonces. Fué construida en las calles Rius Rivera, esquina San Joaquín,. la misma era de maderas del país con balcón a los lados norte, sur, y este.